Qué es un redactor freelance: definición El redactor freelance es un profesional que escribe artículos, posts para redes sociales, white papers, notas de prensa y otros tipos de contenido para negocios y empresas, bajo un contrato de servicios. Es decir, opera como trabajador autónomo o por cuenta propia, en el mundo de la redacción profesional.
Por norma general, cobra por palabra u hora trabajada, o bien por pieza entregada o proyecto finalizado. Además, es habitual que escriba para varios clientes, al mismo tiempo.
Por último, cabe señalar que este profesional suele trabajar como escritor fantasma; es decir, no aparece como autor de los textos que se le encargan.
Diferencia entre redactor freelance, redactor de contenidos y redactor digital A menudo, se utilizan otras denominaciones para referirse al redactor freelance. Tal es el caso del redactor de contenidos y del redactor digital.
Sin embargo, los 3 términos se refieren a 3 cualidades que pueden o no coincidir en el mismo profesional.
Redactor freelance es el que trabaja como autónomo. Redactor de contenidos es el que está especializado en marketing de contenidos. Redactor digital es aquel que escribe para Internet. En definitiva, no son conceptos similares, sino complementarios y, por lo tanto, pueden combinarse.
Dicho esto, cabe señalar que cuando se utiliza la expresión redactor freelance, se suele estar refiriendo a un redactor de contenidos, que trabaja por cuenta propia, escribiendo para Internet.
Ahora bien, estrictamente hablando, la denominación redactor freelance puede abarcar otros perfiles como, por ejemplo, el de un periodista, un redactor técnico o incluso el de un copywriter.
Al fin y al cabo, este último no es otra cosa que un redactor especializado en publicidad.
Para comprender las diferencias, te recomiendo examinar los siguientes tutoriales:
Qué es un redactor de contenidos .
Qué es un redactor digital .
Qué es un copywriter .
Qué hace un redactor freelance Teniendo en cuenta lo anterior, un redactor freelance puede ofrecer un enorme abanico de servicios de investigación, escritura y edición de textos, utilizados por los negocios y empresas, para el desempeño de su actividad económica.
En la siguiente sección, podrás ver un listado de tipos de redactores freelance, desde una perspectiva amplia.
Sin embargo, dado que la concepción más común de este profesional es la de un “redactor de contenidos freelance”, sus funciones suelen corresponderse con las necesarias para ejecutar una estrategia de marketing de contenidos .
Esto incluye, entre otras cosas:
Investigación y planificación de temáticas para contenidos en blogs y redes sociales. Redacción de dichos contenidos. Redacción de boletines de correo electrónico. Edición de documentos para garantizar al comprensión y gramática adecuada. Optimización de contenidos para el posicionamiento en buscadores. Planificación y redacción de white papers, utilizados como lead magnet. Búsqueda de fotos y material gráfico para ilustrar los contenidos. Te recomiendo examinar el tutorial sobre qué es la redacción de contenidos , para comprender la verdadera magnitud de los servicios que puedes ofrecer como freelance.
Dicho esto, en mi experiencia, la mayor parte de los encargos que un redactor freelance recibe consisten en lo siguiente.
En primer lugar, se le suministra un briefing o resumen del proyecto, el cual incluye:
El sector al que pertenece el cliente que ha contratado el servicio de redacción. La audiencia objetivo del texto o documento a redactar. Las instrucciones del contenido a redactar, a menudo, con una estructura preliminar o puntos a tratar. Los plazos de entrega y revisión. Por supuesto, puede haber clientes con menos experiencia, en cuyo caso será el redactor profesional, quien solicitará esta información, e incluso creará el briefing, para la aprobación preliminar del cliente.
En segundo lugar, el redactor procede a escribir el contenido siguiendo las pautas marcadas.
Finalmente, se procede a la entrega del texto, tras lo cual puede haber un proceso de revisión, modificación o ampliación, a requerimiento del cliente.
Tipos de redactores freelance Si nos referimos al redactor freelance de forma genérica, podemos distinguir una gran variedad de tipologías, en función del uso que se haga de sus textos.
Redactor de empresa: especializado en documentos de recursos humanos, planes de negocio, manuales de entrenamiento, memorandos de empresa, casos de estudio, etc. Redactor de relaciones públicas: especializado en notas de prensa, discursos, comunicaciones empresariales, etc. Redactor técnico: especializado en manuales operativos, documentación de procesos, redacción de instrucciones de montaje, etc. Redactor académico: especializado en “papers” o artículos académicos, libros de texto y material escolar. Periodista: especializado en artículos de noticias, guiones de noticiarios, reportajes, etc. Redactor publicitario o copywriter: especializado en textos de conversión y venta, como anuncios, descripciones de productos, páginas de captura, páginas de venta, etc. Ventajas de ser un redactor freelance Trabajar como freelance supone múltiples ventajas, sobre todo, en términos de libertad y autonomía.
Seleccionar a tus clientes Suponiendo que ya dispongas de una cartera estable de clientes o encargos, puedes darte el lujo de rechazar aquellos proyectos que no te atraigan. Esto es algo que no podrías hacer trabajando por cuenta ajena, en un departamento de marketing.
Trabajar desde tu casa y cualquier parte del mundo Es muy frecuente que los redactores freelance tenga la oficina en su propia casa y trabajen online. Eso proporciona una gran libertad de movimientos.
Adaptar tu entorno de trabajo a tu gusto Igualmente, al no tener que acudir a un puesto de trabajo, puedes crear tu propia oficina y dejarla a tu gusto.
Organizar tu propio horario No tienes por qué someterte a la típica jornada laboral. Puedes definir tu propio horario, y tomarte vacaciones cuando lo estimes oportuno.
Decidir tu carga de trabajo Siempre y cuando cuentes con los ingresos suficientes para vivir -ya sea de la redacción o con otras fuentes de ingresos-, puedes determinar tu propio volumen de trabajo, así como el número de horas que trabajes al día, y durante la semana.
Preguntas frecuentes a la hora de contratar un redactor freelance Tanto si quieres ofrecer tus servicios de redactor freelance, como si estás pensando en contratar a este profesional, las siguientes preguntas te ayudarán a tener éxito durante el proceso de selección.
¿Cuáles son las ventajas de trabajar con un redactor freelance? Contar con este profesional tiene múltiples ventajas, entre las que destacan las siguientes.
Por un lado, puedes controlar tus costes, contratando servicios de redacción solo cuando los necesitas. Esto es ideal para pequeños negocios que están comenzando y aún no pueden permitirse aumentar su plantilla.
Por otro lado, también te permite contar con los servicios de un redactor especializado en aquella temática o formato específico, del proyecto para el que lo necesites. Un mayor nivel de especialización te garantiza un texto de mayor calidad, y mejores resultados.
¿Qué criterios se utilizan para contratar a un redactor freelance? La experiencia y el nivel de especialización suelen ser dos de los criterios más importantes.
Un redactor freelance que cuenten con un portafolio de muestras de su trabajo pone de manifiesto rigor y, sobre todo, permite la comprobación de la calidad de su redacción.
No obstante, los negocios con recursos limitados deberían prestar atención a los redactores freelance con menos experiencia.
Su falta de trayectoria no tiene por qué ser un obstáculo, para ofrecer un contenido de calidad. Si cuentan con un portafolio de textos que se adapta a las necesidades del negocio, son la opción idónea.
Por otro lado, el nivel de especialización puede ser de gran importancia en proyectos en los que se busca la máxima calidad.
Finalmente, el estilo de redacción también debe ser tenido en consideración.
Los mejores profesionales pueden crear y adaptar su estilo a la voz y tono de marca , del negocio para el que escriben.
Sin embargo, conviene que haya cierta afinidad previa, para garantizar la fluidez del proyecto.
¿Puede un redactor freelance trabajar sin supervisión? Esta pregunta requiere de algunas matizaciones.
Evidentemente, la condición de “freelancer” implica que el redactor trabaja de forma autónoma. Por lo general, esto implica que su labor se realiza de manera independiente, y con un bajo nivel de supervisión por parte de sus clientes.
Sin embargo, esto no impide establecer procesos de supervisión, plazos de entrega parcial y final, así como fases de revisión de los textos entregados.
En este caso, la clave radica en si el cliente tiene los recursos y experiencia, para llevar a cabo una supervisión eficaz.
De lo contrario, podría convertirse en un cuello de botella
En mi experiencia profesional, hay que tener mucho cuidado con el fenómeno del “micromanagement”; es decir, la gestión del más mínimo detalle por parte del cliente.
Si se cuenta con los servicios de un redactor freelance es porque el negocio no hace un uso intensivo de contenidos. De lo contrario, tendría a un redactor en plantilla.
Por lo tanto, conviene dar suficiente libertad al profesional, para escribir y ejecutar el proyecto con su criterio y metodología; especialmente cuando el cliente no tiene experiencia.
¿Te interesa la redacción freelance como oportunidad profesional? En ese caso, te recomiendo acceder inmediatamente al siguiente tutorial sobre cómo ser redactor freelance.
Descubrirás un sencillo proceso para abordar este importante proceso de renovación profesional, incluyendo la organización de tu trabajo, y la búsqueda de clientes.